Inundación del 18 de Agosto de 1973 en Irapuato
🔶Trágica historia que impulso el desarrollo de la ciudad
🔶La colonia 18 de Agosto se construyó para dar vivienda a las familias que perdieron su casa
Irapuato, Gto. 18 agosto 2020. El sábado 18 de agosto del año 1973 quedó grabado en la memoria de los irapuatenses, al vivir la más grande inundación de esta ciudad de Irapuato Guanajuato, qué en aquél momento contaba, con poco más de 25O mil habitantes, que se vieron afectados en su integridad física, emocional y en sus pertenencias.
La trágica historia inició minutos después de las 12 de la tarde, cuando los irapuatenses empezaron a decir «Ya viene el agua, ya viene el agua», que de alguna manera estaban conscientes que se inundaría Irapuato, pero no a la magnitud de ser considerada como desastre nacional, después de que el agua paso por las calles durante todo el sábado domingo y parte del lunes.
El agua de la presa «El Conejo» llegó tan rápido y en gran cantidad, que en 3 horas la ciudad ya estaba inundada a más de metro y medio en algunas zonas, lo cual causó la muerte de cientos de personas, especialmente en la tienda departamental denominada «Blanco» que se ubicaba en la calle Guerrero, lo que hoy es Plaza Magna, que estaba con gran cantidad de clientes en la parte subterránea, y que ya no pudieron salir.
La inundación del 18 de agosto de 1973 marcó la memoria de los irapuatenses, los daños materiales fueron en incuantificables, así como las pérdidas humanas que nunca se dio una cifra exacta de las personas que murieron ahogadas.
Para las personas que sobrevivieron, su vida cambió totalmente de un momento a otro. La pérdida de familiares y amigos, la pérdida de sus bienes materiales y la pérdida de la confianza, porque cuentan algunas personas que cada que llovía, pedían a Dios que no se fuera inundar otra vez. El daño psicológico también duró varios años en la mente de las personas, que fueron testigos de la más grande tragedia que ha vivido Irapuato.
Los irapuatenses, que aún se estremecen al comentar la inundación, recuerda como el agua y inundó todas las calles. Entró el agua a la ciudad, dicen, por las vías del ferrocarril ubicadas a un costado de la refresquera Coca Cola. Ese momento fue cuando los ciudadanos entraron en pánico al ver la fuerza y rapidez con que llegaba el agua a la avenida Guerrero y seguía por todas las demás calles dejando a su paso muerte y destrucción.
Dos frases que quedaron para la historia fue la que decían los incrédulos, al escuchar los anuncios de alerta en la radio que recomendaban que se resguardarán en donde pudieran porque Irapuato se iba a inundar. Algunos decían «Me tomo todo el agua que venga».
La segunda frase fue que
«Los ricos quedaron pobres y los pobres quedaron en la miseria».
«La inundación del 73», como también se le conoce, fue una línea divisoria entre el Irapuato de antes y el Irapuato de hoy. A 47 años Irapuato luce altivo y progresista ( A pesar de la pandemia por coronavirus, que se vive desde marzo pasado a la fecha, 20 de agosto 2020), que logró salir adelante gracias al trabajo de los irapuatense, que siempre se han caracterizado por ser gente noble, trabajadora y con valores.
Importante también fue el apoyo nacional recibido por parte del gobierno de la República Mexicana, en ese momento encabezada por el presidente Luis Echeverría Álvarez, quien visitó en tres ocasiones la ciudad de Irapuato para cerciorarse de la situación y de que se entregará la ayuda humanitaria a sus habitantes.
Cientos de familias quedaron sin ningún bien material y vivienda, de ahí surgió la necesidad de construir una nuevo conjunto habitacional, que es la colonia 18 de Agosto,
Algo que nunca se supo, y posiblemente nunca se sabrá, es porqué no sé tomaron medidas de precaución, para que la inundación no fuera tan catastrófica, si fue por negligencia e ineptitud de los funcionarios de la Secretaría de Recursos Hidráulicos, o por los servidores públicos municipales que no tomaron las medidas precautorias ante la situación. En este tema, también se sigue cuestionando el actuar del presidente municipal de ese momento, Max Kirchbach, de quien se dice que estuvo de acuerdo en que se abrieran las compuertas de la presa «El Conejo» la más grande y cercana de esta ciudad, para qué el agua pasará por la ciudad de Irapuato y no afectará grandes cultivos de alguien muy cercano a él entonces alcalde.
Aunque también queda claro, que la naturaleza tuvo mucho que ver, ya que en ese año de 1973 la temporada de lluvias fue muy intensa, según datos proporcionados por el titular de Protección Civil de aquellos años, el doctor Roberto Domínguez, quién aseguraba que en el año de 1973, llovió desde el día 15 de mayo, día de San Isidro Labrador, patrono de los campesinos, hasta el mes de agosto, tres meses de intensas lluvias que llenaron las presas «La Llave» y «La Gavia», las cuales tuvieron que ser despojadas hacia la presa «Ell Conejo», que a vez, que tuvo que ser abierta para desalojar el agua poco a poco, porque se creía que no pasaría de los 30 centímetros en la ciudad, pero la situación se salió de control y algunas zonas registraron un nivel de más de 2 metros de altura. Hecho que se puede corroborar en algunas placas que aún se pueden observar en construcciones del primer cuadro de esta ciudad.
La gran cantidad de agua que inundó las calles de Irapuato arrastró con viviendas vehículos y con miles de personas, mismas que fueron depositadas en una fosa clandestina en el panteón municipal.
La cantidad de basura, lodo y escombros que dejó la inundación fue de más de 140 mil toneladas. La limpieza duró más de dos semanas y en ella participaron más de 5 mil personas y maquinaria de los municipios aledaños, entre ellos León, Silao, Salamanca y Celaya, que fueron solidarios con sus vecinos irapuatenses.
En el tema de salud también se registraron graves problemas, tanto que se tuvo que realizar la vacunación masiva en contra del tétanos y la tifoidea, para evitar que los sobrevivientes de la inundación murieron a causa de estas enfermedades.
La historia de la inundación del 18 de agosto de 1973 en Irapuato, es narrada por las personas de edad adulta como » Lo más trágico y devastador que han vivido los irapuatense en esta ciudad».
TomaNota📌
La presa «El Conejo» se localiza en la comunidad del mismo nombre, ubicada al norte de la ciudad de Irapuato Guanajuato, cerca de la comunidad Arandas, rumbo a Romita.